Este verano, protege tu piel de los rayos del sol
Como cada verano, aspiramos a conseguir un bonito bronceado que podamos lucir durante los 3 meses que dura el buen tiempo y parte del otoño. Una exposición sana y equilibrada al sol, además de proporcionarte un color de piel muy favorecedor, también te hace parecer más saludable.
El sol aporta múltiples beneficios científicamente demostrados:
-Aporta a nuestro cuerpo vitamina D. indispensable para el buen desarrollo de nuestros huesos.
-El sol actúa como un gran antidepresivo ya que favorece el buen estado de ánimo y nos invita a realizar diferentes actividades al aire libre y en compañía de nuestros amigos y familia.
-El sol, de forma controlada y moderada, resulta una solución natural para las personas que sufren en su piel el indeseable acné. También favorece a las pieles atópicas y las que sufren de psoriasis.
Sin embargo, debemos tener mucha precaución a la hora de tomar el sol. Debemos ponernos el protector solar más adecuado para nuestra piel y no debemos exponernos más del tiempo recomendado.
El bronceado no es más que la respuesta defensiva de nuestra piel a la agresión producida por la radiación solar. En la capa exterior de la piel, la epidérmica, se encuentran las células con pigmento, que es la melanina.
Para evitar el fotoenvejecimiento debemos atener a los mínimos cuidados necesarios:
-Usar factor de protección solar 50 o superior.
-Aplicar la crema media hora antes de salir de casa.
-Aplicar la crema solar cada dos horas.
-Evitar tomar el sol entre las 12 y las 16 horas.
Las pieles más sensibles
Los daños provocados por una exposición sin protección adecuada al sol pueden verse acentuados en pieles especialmente sensibles como las de fototipo más claro y blanquecino y las pieles secas.
Hidrata la piel después de tomar el sol
Si queremos contrarrestar los efectos dañinos que el sol ha podido causar a nuestra piel, no tenemos más remedio que poner en práctica una serie de cuidados post solares, una vez que lleguemos a casa.
El mejor consejo de belleza después de un día al sol es hidratar la piel al máximo
1. Una buena ducha
2. No es el momento para una exfoliación
3. Hidratación a tope
Sigue estos consejos y presume de un bronceado saludable este verano.